Con el paso de los años, uno de los
problemas que se ha ido acrecentando en la escuela andaluza hasta límites intolerables es la
falta de sustitutos en los centros cuando un profesor causa baja.
La creación de la figura del profesor de apoyo ha llevado a que
la primera baja que cause un docente en el centro
nunca sea cubierta por otro sustituto, por lo que el centro se ve en la obligación de liberar al profesor de apoyo de las tareas para las que es designado oficialmente por la administración, causando el consiguiente perjuicio a los niños que necesitan a este profesor.
Cuando hay una
segunda baja, si esta es de
corta duración, la administración hace una rocambolesca cuenta de tal manera que sumando las horas libres que tienen todos los profesores del centro, cubren la vacante, por lo que
tampoco mandan a nadie. Esto hace que los niños vean a cinco docentes diferentes al día, un profesor por cada hora de la mañana.
Si la segunda baja es prolongada, ya llegará alguien…
En nuestro centro, la situación es la siguiente: la primera baja es la de la profesora de apoyo, y la segunda es la del profesor de sexto curso, D. Juan Perea Sierra.
Las dos bajas son de
larga duración y aún
no han sido cubiertas ni se sabe cuando lo harán. Los niños que requieren una atención especial en el centro quedarán desatendidos durante todo el año y los niños de sexto curso, en puertas de la secundaria no tienen tutor.
¡Casi un mes así y todavía no han mandado a nadie!
¿Hasta cuando vamos a seguir tolerando los padres esta situación? Desde nuestro punto de vista
esta situación es intolerable por lo que hemos decidido
emprender acciones dedicadas a presionar a la administración para que sean cubiertas dichas bajas de nuestro centro de manera inmediata. Desde la convocatoria de la reunión con todos los padres del centro el pasado cinco de noviembre, hemos recabado 110 firmas de todos los padres del centro que hemos presentado a la consejería de educación, hemos solicitado al ayuntamiento de Pilas que nos apoye en dicha solicitud y hemos solicitado la mediación con el consejero de educación a la federación de padres de alumnos (FAPA). Si esta presión ejercida desde estos tres frentes diferentes a la delegación, no fuera suficiente, no descartamos la organización de otras medidas, para lo que
vamos a necesitar la colaboración de todos los padres del centro, porque esto nos puede tocar a cualquiera.